¿Le ha ocurrido que las urgencias de cada día generan una gran distracción del equipo y llegando al final del año, se han encontrado con un cierre de ejercicios sin mucho impacto? O que se lograron los objetivos mínimos y el equipo terminó agotado? O habrá encontrado que han participado en más actividades de las previstas porque parecieron ¨muy interesantes¨ o solo porque la competencia estaría presente. Mucho antes del final del año, los presupuestos quedaron cortos, incluso algunas actividades tuvieron que ser postergadas para el año siguiente?. Y las pérdidas o ganancias, también reflejan ese bajo impacto? Revise los años anteriores, han sido parecidos?. Le comentamos las posibles razones detrás de esos problemas.
Es posible que los planes, cuidadosamente elaborados por su empresa, pudieron deshacerse debido a una correlación imprevista de factores.
En primer lugar, la emergencia de variables externas inesperadas, como cambios en las tendencias del mercado, que dejaron obsoletos los estudios de mercado realizados. Estos cambios bruscos obligan a recalibrar una estrategia sobre la marcha, lo que pudo provocar una desalineación con los objetivos iniciales.
En segundo lugar, la ausencia de prioridades claramente establecidas que pudieron repercutir negativamente en la planificación estratégica de su empresa al dispersar la atención y los recursos entre varias iniciativas con bajo impacto en los objetivos estratégicos. En consecuencia, los esfuerzos de su organización se dispersaron. La falta de focalización conduce a una asignación inadecuada de tiempo, mano de obra y fondos. El resultado es la falta de avances significativos hacia objetivos críticos y deja a la organización vulnerable ante los retos de la competencia y los cambios en la dinámica del mercado.
Posiblemente, una inadecuada estimación de las necesidades de recursos afectó la planificación. El uso inapropiado del tiempo, la mano de obra y los recursos financieros obstaculizan el progreso del plan para obtener resultados óptimos.
Un factor crítico para resultados indeseados, pudo ser un análisis inapropiado del panorama competitivo. No evaluar a fondo las acciones y respuestas de los competidores hace que la estrategia seleccionada carezca de diferenciación y no aproveche las posibles brechas del mercado.
Tal vez, surgió una desconexión entre los objetivos estratégicos y las operaciones cotidianas de la organización. Los objetivos de alto nivel del plan no se tradujeron en medidas prácticas y adecuadas a las capacidades de los distintos departamentos, lo que pudo haber causado confusión y dificultó su aplicación.
Otra razón pudo deberse a una comunicación inoportuna dentro del equipo, esto impide la correcta ejecución. Cuando existe una difusión ineficaz de información clave, generalmente provoca confusión y retrasos. Esta falta de consistencia puede alterar el esfuerzo coordinado necesario para implementar el plan con éxito.
O quizás, el exceso de confianza en un único enfoque pudo ser perjudicial. No incorporar planes de contingencia para sortear obstáculos imprevistos puede llevar a resultados indeseados. Esta rigidez impide la adaptación de la empresa ante circunstancias cambiantes, dejando el plan expuesto al fracaso.
Y finalmente; cómo están los vínculos dentro de la empresa?
“No importa cuán carismático o inspirador sea el líder, si no hay gente inspirada en la organización para llevar esa visión a la realidad, para construir una infraestructura con sistemas y procesos, entonces, en el mejor de los casos, reina la ineficiencia y, en el peor, el fracaso¨. Simon Sinek
Por lo tanto, es fundamental que los líderes de las organizaciones, tomen como prioridad la construcción de una cultura organizacional fuerte; en la que todas las personas se interesen genuinamente por los miembros de sus equipos, no solo en las métricas, números y resultados a corto plazo. Simon Sinek, el popular orador de las charlas TED Talk y exitoso autor de libros, comenta que cuando las personas se sienten seguras y reina la confianza, la energía de todos se enfoca en proteger a la organización y hacer que esta avance.
En retrospectiva, reconocer la posibilidad de que surgieran algunos de estos problemas que ocasionaron la pérdida de oportunidades y elaborar un plan más adaptable, con más recursos y más comunicativo puede mejorar la ejecución el próximo año para sumar a la implementación de los objetivos a largo plazo. Es de suma importancia mantener la flexibilidad, la preparación, la comunicación abierta y un buen clima organizacional ante situaciones complejas, en constante evolución.
Si desea asegurar la planificación estratégica de su empresa u organización, contactenos! Con mucho gusto podremos acompañar el camino al éxito de todo su equipo.
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